miércoles, 9 de diciembre de 2009

NORMAS DE SEGURIDAD CON ARMAS DE FUEGO

  He querido tratar este tema porque lo considero de vital importancia antes de proceder a usar cualquier Arma de Fuego, y nunca está de más el recordar las normas fundamentales de seguridad, debiéndolas conocer y aplicar en todo momento los usuarios de Arma de Fuego para hacer un uso seguro de las mismas. La seguridad de las Armas de Fuego es responsabilidad del propietario y/o usuario de las mismas debiendo de crear un hábito de seguridad y seguirlo siempre para un uso correcto y seguro, repitiendo siempre estos pasos cada vez que manipule un Arma. Ninguna norma de seguridad puede garantizar todas aquellas situaciones posibles de ocurrir, sino que va a depender del sentido común y del entrenamiento apropiado del usuario, siguiendo las normas de seguridad y pensando en todo momento lo que se va a hacer. En primer lugar siempre se deberá de remitir al manual facilitado por el fabricante. Estas normas serán informadas a los tiradores por parte del Instructor de Tiro y explicadas, siendo las siguientes:
  • TODA ARMA DE FUEGO ESTÁ SIEMPRE CARGADA Y POR TANTO SERÁ TRATADA COMO TAL. Cuando nos encontremos ante un Arma de Fuego siempre la consideraremos esta como si se encontrara cargada, hasta que comprobemos por nosotros mismos que no es así, aún después de comprobado se seguirá tratando como tal, siguiendo el resto de normas, ayudándonos a crear ese hábito de seguridad. “No es casual que la mayoría de personas que provocan un disparo accidental exclamen: .. pensé… que… estaba… descargada...” J.Pecci.
  • NUNCA INTRODUZCA EL DEDO EN EL DISPARADOR HASTA QUE NO ESTÉ DISPUESTO A DISPARAR SOBRE SU BLANCO. Al empuñar el arma el dedo índice de la mano que la empuña, permanecerá fuera del disparador colocado hacia delante estirado a lo largo del armazón del Arma, hasta el momento de efectuar el disparo. Siendo más conscientes de la dirección de nuestra Arma y evitando además una contracción involuntaria del mismo.
  • NUNCA DIRIJA SU ARMA HACIA ALGO SOBRE LO QUE NO ESTÉ DISPUESTO A DISPARAR. Desde que se extrae el Arma de la funda y/o durante su manipulación ésta deberá dirigirse en todo momento en dirección a un lugar seguro (Ej.: al suelo y en un ángulo de 45º delante de nosotros, una zona fría). No dirija el Arma a otra persona ni a usted mismo, aun estando descargada, para no crear un mal hábito.
  • COMPRUEBE SIEMPRE SU ARMA. En todo momento debe de saber en qué estado se encuentra su Arma. Cuando la perdamos de vista y cada vez que la volvamos a coger (ej.: armero o cuando nos entregan un Arma), se realizará la comprobación por nosotros mismos, mirando en el interior de la/s recamara/s y alojamiento del cargador para verificar que no contiene ningún cartucho.
  • ESTÉ SIEMPRE SEGURO DE SU BLANCO. Antes de efectuar un disparo se debe de tener la certeza de dónde se va a disparar, no hacerlo a una sombra, reflejo, movimiento, ruido…, debiendo de identificar correctamente su blanco.
  • GUARDE SUS ARMAS EN LUGAR SEGURO, CON LA RECAMARA VACÍA Y EL CARGADOR QUITADO. Usted es el responsable de su Arma en todo momento. Debe de guardarse en un lugar seguro, fuera del alcance de niños, curiosos y personas inexpertas, siempre en el mismo lugar y condiciones, el Arma debe de guardarse descargada y el cargador separado del Arma.
  Así como las normas complementarias que se establezcan en las galerías y campos de tiro, siendo las siguientes:
  • Observar en todo momento y de forma escrupulosa las instrucciones del Director de Tiro e Instructores.
  • Permanecer cada uno en su puesto y atento a la sesión, sin hablar con el resto de usuarios.
  • No está permitido fumar.
  • En la manipulación del Arma y municiones se regirá rigurosamente a las instrucciones que se reciban.
  • En caso de interrupción, se subsanará por el tirador en dirección a los blancos, de no ser posible se permanecerá en su sitio y levantará el brazo débil para que sea subsanado por el Instructor.
  • No se comenzará el ejercicio sin estar correctamente enterado del mismo y sólo cuando lo indique el Director de Tiro.
  • A la voz de Alto el Fuego o señal acordada para tal fin, se procederá de la forma indicada por el Director de Tiro, y sin avanzar hacia los blancos hasta recibir la orden oportuna.
  • Cualquier objeto caído al suelo se recogerá después de concluido el ejercicio, incluida la munición para efectuar el mismo. Salvo si el objeto es el Arma de Fuego y el ejercicio fuera en movimiento, en cuyo caso se dará la orden de “Alto el Fuego” de forma clara y directa a toda la línea, importante recordar que en caso de que se valla a caer el Arma no intentar cogerla en el aire ya que se podría producir un disparo accidental, mientras que si cae al suelo no debe ocurrir nada, ya que disponen de seguro automático de caída.
  También se deberá de recordar la obligación de usar los medios de seguridad y protección para el tirador, siendo los siguientes:
  • Cascos protectores auditivos.
  • Gafas de protección óptica.


                                                                     por José Jiménez Ortiz



martes, 8 de diciembre de 2009

DEFENSA PERSONAL POLICIAL

  Durante el pasado mes de noviembre entre los días del 4 al 25, he tenido la suerte de poder asistir con varios compañeros a un Curso de Defensa Personal impartido por D. Alberto Simón gran profesional de las Artes Marciales; en el transcurso del cual se ha puesto de relevancia una vez más la importancia de las “Artes Marciales” para la función policial. Debido al carácter de servicio publico de los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y encontrándose entre sus misiones la de protección del libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana, no siendo éste un cometido fácil en la sociedad actual, debido a la gran cantidad de situaciones con la que nos encontramos en el quehacer diario.
  Cada vez son más frecuentes los enfrentamientos con los Agentes de Policía y la falta de respeto hacia los mismos, simultáneamente la sociedad nos demanda una respuesta más rápida y eficaz en la detención y neutralización de los delincuentes o aquellas personas agresivas o peligrosas, a la vez que se alzan voces, en la mayoría de la ocasiones injustamente, en contra de la brutalidad policial.
  Los Cuerpos Policiales de todo el mundo a lo largo del tiempo han ido adoptando diversas Artes Marciales de acuerdo a sus necesidades y requerimientos, adaptándolos a los entrenamientos de sus Agentes, tales como el KARATE, JUDO, KEMPO, KOBUDO, JUJITSU. WINGTSUN y AIKIDO, siendo este último el más utilizado ya sea solo o en combinación con otros, debido a su carácter primordial de no violencia, a la gran cantidad de técnicas de control y reducción, demostrando una gran eficacia y seguridad en un tiempo mínimo. También se debe de hacer mención al Krav Maga, que es el método de defensa utilizado por las Fuerzas de Defensa y Servicios Secretos de Israel, de los que más adeptos ha encontrado en los últimos años, debido a que no hay reglas y utiliza cualquier elemento o instrumento al alcance para la defensa, por la sencillez, lógica y facilidad de aprendizaje.
  En el ejercicio de nuestras funciones debemos de regirnos por los principios de Congruencia, Oportunidad y Proporcionalidad en la utilización de los medios a nuestro alcance. La adecuación a los fines y a los medios, el respeto al honor y la dignidad de las personas y la responsabilidad en el ejercicio de la función, reservándose el uso del Arma de Fuego cuando exista un riesgo racionalmente grave para la vida o integridad física. Todo esto hace que los Agentes de Policía debamos de adquirir unas habilidades y conocimientos que permitan reaccionar y neutralizar de forma eficaz, ante determinadas situaciones de cierta resistencia, agresividad o violencia, y en caso necesario actuar contundentemente, y a la vez reduciendo al mínimo indispensable el daño causado cuando el uso de la fuerza física sea imprescindible, debiendo ser capaces en primer lugar de garantizar nuestra seguridad y la de terceras personas, proteger los elementos con los que contamos (tales como el arma de fuego), manteniendo una distancia de seguridad y que se lleve acabo con discreción y mínimamente “espectacular” sin agravamiento de la situación inicial que deteriore y sea contraria a la buena imagen que debemos de dar los Agentes en las intervenciones con los ciudadanos.
  No siendo partidario del entrenamiento de aquellas “Artes Marciales o métodos” que incluyen fundamentalmente técnicas de golpeo con puños y piernas, para no potenciar esta respuesta “demasiado contundente” que puede surgir de forma instintiva ante una determinada situación, ya que tan solo deberían de utilizarse en una situación plenamente justificada y cuando no exista otra alternativa. La respuesta a una agresión debe ser adecuada a las circunstancias y características de dicha situación, evitando producir una lesión innecesaria.


                                                                                       por José Jiménez Ortiz